“Me río cuando dicen que El Vaticano no está informado”: Cardenal de Nicaragua
Asegura que el Papa Francisco está “súper informado” de la violencia de Daniel Ortega contra la Iglesia.
El Cardenal nicaragüense, Leopoldo Brenes, dijo este domingo que el Papa Francisco está "súper informado" sobre la situación en Nicaragua, en donde el Gobierno del Presidente Daniel Ortega mantiene bajo arresto a un obispo y a siete sacerdotes por diferentes motivos.
"El Papa está súper informado. La Secretaría de Estado (del Vaticano) está bien informada, así que personalmente me río" cuando dicen que no, señaló Brenes, arzobispo de la Arquidiócesis de Managua, en una entrevista con EFE tras la eucaristía en la Catedral Metropolitana.
El alto jerarca calificó como "bien triste" que se critique al Papa Francisco porque supuestamente "no sabe nada, que está desinformado" de lo que ocurre en Nicaragua, principalmente con la Iglesia católica.
"Esa es la peor mentira que a veces algunos medios de comunicación, no sé con (qué) intereses, y algunas personalidades, con qué intereses, están haciendo eso", reprochó.
Brenes aseguró que el Papa Francisco está orando por la Iglesia católica nicaragüense, al igual que los obispos que integran el Consejo Episcopal Latinoamericano y del Caribe (Celam).
No hay negociaciones con el Gobierno
Explicó que "no hay negociaciones" con el Gobierno de Ortega sobre la situación de los religiosos presos y que la Iglesia católica sigue orando.
"Sabemos que siempre la cueva más oscura, el túnel más oscuro, al final, tiene un rayo de luz y esa es nuestra esperanza", señaló.
"Nosotros somos hombres de diálogo, la Iglesia no es de confrontación, sino que la Iglesia es de diálogo. El Santo Padre lo ha señalado, la Conferencia Episcopal lo ha señalado muchas veces que todas las situaciones de confrontación no llevan a nada, porque la violencia engendra violencia y una acción trae una reacción", añadió.
Sostuvo que los pastores se fortalecen con la oración y que tienen la certeza de contar con el apoyo de su gente, que "sigue orando tanto a nivel nacional como internacional".
Obispo Rolando Álvarez está bien
Sobre el Obispo de la diócesis de Matagalpa (norte), Rolando Álvarez, un crítico del Gobierno de Ortega y quien este domingo cumple 17 días en arresto domiciliario en Managua, sin que hasta ahora se le hayan formulado cargos, Brenes afirmó que, pese a esas condiciones, se encuentran bien.
"He estado platicando con él (...) De salud me dijo que está muy bien. Lo encontré de mejor ánimo. Tuve un buen tiempo platicando con él. Y él nos pide que sigamos orando por él y que ojalá pues, el Espíritu Santo nos ilumine para que pronto solucionemos este conflicto", relató.
Brenes explicó que el obispo Álvarez "está siendo bien cuidado. Su familia va dos veces por día a visitarlo. En la mañana y en la tarde", y que "su prima, que era la que le cuidaba la casa, limpiaba y le cocinaba los días que estaba en Managua, le sigue cocinando", indicó.
Sacerdotes siguen en El Chipote
En el caso de los otros siete sacerdotes que se encuentran en prisión, el Cardenal Brenes informó que han sido visitados por el presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua y obispo de la diócesis de Jinotega (norte), Carlos Enrique Herrera, y que se hicieron "gestiones para que las familias pudiesen estar con ellos".
"El miércoles pasado fueron los familiares a estar con ellos por un lapso de dos a tres horas", indicó.
Consultado sobre la posibilidad de que los sacerdotes sean trasladados de la cárcel policial El Chipote, oficialmente conocida como la Dirección de Auxilio Judicial, donde se encuentran recluidos, hacia sus domicilios, Brenes dijo que "en este momento no" ha sido posible, pero "se están haciendo todas las gestiones" y van "poco a poco".
Relaciones Iglesia-Estado
El arresto del Obispo Álvarez y los siete sacerdotes es el capítulo más reciente de un último año especialmente convulso para la Iglesia católica de Nicaragua con el Gobierno de Ortega, quien ha tildado de "golpistas" y "terroristas" a los jerarcas.
Este año, el Gobierno sandinista expulsó del país al nuncio apostólico Waldemar Stanislaw Sommertag y a 18 monjas de la orden Misioneras de la Caridad, fundada por la Madre Teresa de Calcuta.
También ha llevado a prisión a siete sacerdotes, cerrado nueve estaciones de radio católicas y sacado de la programación de la televisión por suscripción a tres canales católicos.
La Policía además ha ingresado por la fuerza y allanado una parroquia, impedido a los feligreses recibir la eucaristía dentro del templo y sitiado a otros sacerdotes en sus iglesias, entre otros.
Las relaciones entre los sandinistas y la Iglesia católica de Nicaragua han estado marcadas por roces y desconfianzas en los últimos 43 años.
La comunidad católica representa un 58,5% de los 6,6 millones de habitantes de Nicaragua, según el último censo nacional.
EFE